Un ambiente delicado y femenino.

 

Un ambiente delicado y lleno de luz fue lo que se trabajó para este dormitorio para bebé. Colores neutrales, como el blanco y el gris, juntos tonalidades de rosa, crean una atmósfera muy dulce y femenina. Piezas como el candelabro, los estantes y el espejo le dan un aire clásico a la habitación, mientras que el mural, las canastas y los otomanes hacen del espacio, un entorno original y único.

Fotografías por Alessandra Tanzi.